Como veterinario, mejorar tu calidad de vida debería ser un asunto prioritario. El burnout está llegando a niveles de pandemia entre la profesión. Los motivos ya empiezan a ser conocidos: exceso de trabajo, sobreexigencia mental y emocional, horarios que impiden tener tiempo libre, poca conciliación familiar. ¿Las consecuencias? Agotamiento, falta de rendimiento, depresión y en casos extremos, abandono de la profesión. La práctica veterinaria es absorbente aunque no tiene por qué ocupar el 100% de tu vida. ¿Te gustaría tomar las riendas y empezar a cambiar las cosas?
El burnout también te puede afectar, aunque no lo creas
Antes de seguir leyendo, te recomendamos realizar el test de Burnout. Muchos veterinarios nos han comentado que lo hicieron por curiosidad, convencidos de los resultados negativos. Y la sorpresa fue ver que el test reflejaba niveles medios/altos de burnout y no eran conscientes de ello.
Con los resultados en la mano, ahora ya puedes leer el artículo. Hemos elaborado este decálogo a partir de las técnicas que usan los veterinarios para descargar tensiones y liberarse del estrés del trabajo. No intentes ponerlas en práctica todas de golpe, pues corres el riesgo de no hacer nada. Empieza por la primera, ponla en práctica durante una semana, sé constante. Valora cómo pasas el día y después ya vendrá todo lo demás.
Decálogo para mejorar la calidad de vida del profesional veterinario
- Controla tu agenda. Repasa tus actividades diarias. ¿Cuánto tiempo pasas en la Clínica? ¿Cuánto tiempo te queda libre para realizar tus actividades favoritas? Valora cuáles son necesarias y cuáles te satisfacen más.
- Procura salir puntual. Organiza y optimiza el trabajo para que sea posible. A veces, como comentaba Diana Palacios, solo se necesita dejar de perder el tiempo en tonterías para conseguirlo. Empieza de forma gradual y luego hazlo extensivo al menos a tres días por semana.
- No te lleves el trabajo a casa. Salir puntual está muy bien siempre que no te lleves a casa lo que no has podido acabar en la Clínica. Esto incluye informes, llamadas a clientes mientras regresas a casa, contestar el correo electrónico o preparar presentaciones. Deja el máximo trabajo posible en la Clínica para que tu tiempo libre sea totalmente tuyo.
- Silencia los grupos de whatsapp de la Clínica. Sé consciente de que tu tiempo libre es tuyo. Si hay alguna cosa realmente urgente, no te lo dirán por whatsapp. Ya te llamarán por teléfono.
Gestiona tu agenda, procura salir a la hora, no te lleves el trabajo y silencia el chat de la clínica.
5. Agenda dos o tres momentos libres entre semana para hacer lo que realmente te gusta. ¿Te apetecería tener tiempo para practicar boxeo, salir a correr, ir en bicicleta, escalada, cerámica, jardinería, un curso de cocina, música, escritura creativa, hacer teatro, Urban Sketching…? Hay muchísimos deportes y hobbies que te están esperando. El ejercicio físico y las actividades recreativas liberan endorfinas y nos hacen sentir mejor, reduciendo el estrés. Valora estas actividades como algo tan importante para ti como tu trabajo. Si tú estás bien, estarás bien también como veterinario.
6. ¡Sal con tus amigos! No anules las salidas con tus amigos por pereza o cansancio. Las pocas ganas de salir pueden ser síntoma de Burnout. El contacto social es importantísimo para combatir el estrés. Si tus amigos también son veterinarios, ¡prohibido hablar de pacientes! Ríe, llora si es necesario y descarga tensiones. Diviértete y disfruta de la vida.
7. Practica alguna técnica de relajación al llegar o antes de salir de casa, such as deep breathing, yoga, meditation… In the BodyVet section you will find VetYogi: guided meditation, yoga and breathing exercises developed by a certified yoga and breathing instructor who is also a veterinarian – Dr. Cris Pestana – with specific series to prevent the most common physical (and mental) injuries among veterinary professionals.
Programa algo de tiempo libre, sal con tus amigos,practica algunas técnicas de relajación y haz de tu casa un espacio acogedor.
8. Convierte tu hogar en un espacio acogedor. Tu hogar debería ser tu refugio y tu zona de confort, no una extensión de la Clínica. Un espacio acogedor para pasar un tiempo relajado, solo o con amigos y familiares, tomando una bebida caliente con tu pastel favorito, leyendo un buen libro o escuchando música. Pon luz suave y enciende velas aromáticas –escoge lavanda por sus efectos antiestrés- y sumérgete en el Hygge.
9. Organiza las tareas domésticas. No hay nada más agobiante que estar leyendo un libro mientras vas pensando que solo hay queso y una lechuga mustia en la nevera o ves montones de ropa sucia por el rabillo del ojo. Intenta agrupar las tareas domésticas un día a la semana y planifica la compra para no tener que ir al supermercado cada día. El tiempo que pierdes a diario con estas tareas lo podrás destinar a otras cosas mucho más interesantes para tu relajación.
10. ¿Y qué pasa cuando hay niños? Este decálogo está muy bien para veterinarios que viven solos o en pareja, ¿verdad? Cuando hay uno, dos o tres niños es más difícil encontrar espacios de relax. Sin embargo, tener tiempo de calidad para dedicárselo a ellos también te ayudará a olvidarte de la Clínica y reducirá una de las causas de Burnout: el problema de la conciliación familiar. Además, seguro que si te organizas con tu pareja o con otros padres podrás encontrar también tiempo para ti mismo.
Empieza con pequeños cambios y realiza el test de Burnout periódicamente para comprobar cómo evolucionan los resultados del test. Será un reflejo de cómo te sientes y cómo ha mejorado tu calidad de vida ¿Estás listo para el cambio?