“Los veterinarios equinos trabajamos incansablemente para mejorar el estado de los caballos de otros, por una recompensa significativamente menor que nuestros homólogos humanos con un mayor riesgo de daño para nosotros mismos…Sin embargo, puede contribuir al agotamiento porque creemos que debemos seguir satisfaciendo las necesidades de los demás antes que las nuestras”.
La doctora Colleen Best³ define de maravilla una de las causas que puede derivar en burnout entre los veterinarios equinos. El burnout puede derivar en trastornos como la ansiedad y la depresión, agravados por la fatiga por compasión y el cansancio extremo.
La realidad de la veterinaria equina
En Europa la gran mayoría de veterinarios trabajan con pequeños animales. Solo el 21% lo hace en caballos y otras especies equinas. El 5,8% de los veterinarios que se gradúan anualmente en Estados Unidos ingresan en la clínica de caballos. De ellos, el 50% la abandona al cabo de 5 años para ejercer en pequeños animales. Del conjunto de veterinarios de ese país, solo un 4,6% trabajan en la actualidad en caballos.
La alta concentración de veterinarios en zonas urbanas, dedicados principalmente a pequeños animales, crea falta de profesionales equinos y de animales de producción en las zonas rurales.
La fotografía que dibujan los estudios tiende a una mayor concentración de veterinarios de pequeños animales ubicados en zonas urbanas. Esta tendencia está provocando una falta de recursos en las zonas rurales que afecta tanto a los veterinarios de caballos como a los de animales de granja: pocos efectivos, largas jornadas laborales, largos desplazamientos y horarios erráticos.
Esta realidad puede provocar agotamiento extremo, ansiedad, depresión y llegar al extremo de abandonar la profesión. En algunos casos graves se puede llegar incluso a atentar contra la propia vida. El riesgo de suicidio entre veterinarios es el doble que en el resto de las profesiones sanitarias.
El burnout en veterinarios equinos
Algunos de los factores que llevan al agotamiento en los veterinarios y veterinarias de caballos son comunes para toda la profesión:
- Largas jornadas laborales y sobrecarga de trabajo, principalmente por falta de veterinarios en algunas zonas.
- Urgencias en horarios intempestivos.
- Dificultades para la conciliación familiar. La veterinaria de equinos todavía es menos compatible con la conciliación familiar. Teniendo en cuenta que es una profesión cada vez más dominada por las mujeres, es significativo que en el Reino Unido algunas veterinarias abandonan la profesión cuando piensan tener familia después de cinco años o más de ejercer⁵.
- Ciberacoso. El ciberacoso ocurre cuando los propietarios de caballos dejan comentarios negativos en las redes. Aunque es más conocido en pequeños animales, también ocurre en el mundo del caballo. El ciberacoso genera una tensión en el lugar de trabajo que puede derivar en depresión y estrés.
Los veterinarios de caballos tienen siete veces más probabilidades de sufrir una lesión que terminaría con su carrera que un bombero
La veterinaria de equinos vive además unas circunstancias que la hacen más dura que la de pequeños animales:
- Salarios inferiores. En general, los salarios obtenidos por su trabajo suelen ser inferiores a los de pequeños animales, según la encuesta VetSurvey de 2018.
- Trabajar con frío, lluvia, nieve o calor extremo. Los veterinarios de caballos deben trabajar con independencia de las inclemencias del tiempo. Los más jóvenes, además, pueden estar disponibles al 100% para sus clientes para demostrar su valía ante sus clientes o sus empleadores. Y según el artículo de Piavita², una vez que los clientes esperan esta disponibilidad, es difícil de cambiar.
- Largos desplazamientos. El trabajo les obliga a realizar muchos kilómetros a lo largo del día.
- Riesgo de lesiones. Los veterinarios de caballos tienen siete veces más probabilidades de sufrir una lesión que terminaría con su carrera que un bombero ⁵. Una gran parte de estas lesiones ocurren a pesar de la sedación y la contención, generalmente en las evaluaciones de cojeras o exámenes dentales. El riesgo de lesiones por mordeduras, coces o empujones es un factor a tener en cuenta cuando una veterinaria se queda embarazada. Si es tu caso, la legislación europea protege los derechos de la mujer embarazada. ¡Hay alternativas antes de dejar la profesión que tanto te gusta!
La Fatiga por Compasión también afecta a los veterinarios de caballos
La Fatiga por Compasión es el resultado de la combinación de la personalidad del individuo con la realidad de su entorno. El tipo de personalidad que atrae la profesión veterinaria junto con los horarios de trabajo erráticos, los pacientes que sufren y los propietarios decepcionados crean el escenario perfecto para desarrollar el síndrome de Fatiga por Compasión.
Los síntomas de Fatiga por Compasión incluyen:
- Disociación. Estás físicamente presente en el trabajo aunque tu mente es incapaz de concentrarse en lo que estás haciendo, viviendo como si estuvieras desconectado de la realidad. Funcionas en piloto automático.
- Entumecimiento emocional. Esta es la manera que tiene el cerebro de aliviar el sufrimiento: te cuesta expresar los sentimientos, definir lo que te pasa y relacionarte con las experiencias que te rodean.
- Aislamiento. Dejas de tener contacto social y tiendes a aislarte en casa o refugiarte en las nuevas tecnologías. Puede que llegues a pensar que como nadie entiende tu situación, no vale la pena discutirla ni explicarla. Deja de disfrutar de las actividades que solía disfrutar.
- Hipervigilancia. Este es un estado de mayor sensibilidad sensorial que a menudo se acompaña de una exageración en la intensidad de sus reacciones. Este es un estado elevado de alerta diseñado para protegerlo del peligro, lo que lo vuelve más irritable de lo habitual.
- Problemas de sueño. Le resulta difícil conciliar el sueño o duerme demasiado.
- Llanto. Lloras por diferentes situaciones y con frecuencia, ya sea por algo que pasó o sin razón aparente.
- Evitación y/u obsesión. Evitas cualquier cosa relacionada con la fuente de la angustia o te vuelves y te enfocas obsesivamente.
Si sospechas que puedes tener algún síntoma de Burnout o Fatiga por Compasión, puedes realizar los tests de HVP totalmente gratuitos. Los encontrarás en los siguientes enlaces:
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Referencias
- Shortage of veterinarians in rural and remote areas. FVE. July 8, 2020
- Mental health and Well-being in Equine Veterinary Practice. Jessica Ehlert. Piavita.
- Reclaiming what matters: moving through Burnout as an Equine Veterinarian. Colleen Best, DVM, PHD, BSCH. November 21, 2022
- Labor shortage prompts AAEP to form workforce commission. R.Scott Nolen. AVMA News. Aug 17, 2022
- Support for U.K. Veterinarians Seeking Work-Life Balance. Stephanie L. Church. The Horse. Aug 20, 2018
- VetSurvey2018. Federation of Veterinarians of Europe.