Un buen ambiente de trabajo en la clínica evita el burnout de los empleados y compañeros. Para conseguir trabajar con buen rollo (good vibes?), debemos aprender a relacionarnos con los demás sin herir sus sentimientos. Descubre cómo ser una persona asertiva en 6 tips y fomenta el espíritu de equipo.
El ambiente de trabajo en una clínica veterinaria puede ser de todo menos relajado: perros que ladran, teléfono que suena, conversaciones cruzadas, aullidos post-anestesia, urgencias que activan todas las señales de estrés, cirugías complicadas…
Cuando vamos tan cargados emocionalmente es fácil y comprensible que cualquier error desencadene situaciones de tensión. A fin de cuentas, todos somos humanos y cada uno tiene su carácter.
Pero por difícil que sea el día a día, nada justifica que hablemos a gritos ni demos rienda suelta a nuestro mal humor. Ya que la clínica veterinaria es estresante per se, si hay buen rollo en el equipo todo resultará más fácil de sobrellevar ¿verdad?.
Descubre cómo lograr este buen rollo que tanto nos gusta con 6 recomendaciones sobre asertividad. No importa que solo tengas a tu cargo a un auxiliar o líderes un equipo completo de veterinarios o ATVs. Si eres un líder asertivo, seguramente el resto seguirá tu ejemplo y ayudarás a mejorar el ambiente general de la clínica.
6 tips para ser un veterinario o ATV asertivo
¿Qué ventajas vas a obtener siendo un veterinario, ATV y/o jefe asertivo?
La primera, evitar malentendidos. Si te expresas de forma clara y directa de manera que nadie deba adivinar lo que quieres decir, evitarás confusiones, malentendidos o interpretaciones equivocadas.
La segunda, aumentarás la confianza y la eficiencia de los miembros del equipo, ya que cada uno sabe cuál es su rol y su responsabilidad.
Y la tercera y más importante, mejorarás la autoestima de todos los miembros del equipo. Se sentirán valorados y respetados, lo que reducirá la posibilidad de “quemarse” por el trabajo.
Suena perfecto ¿verdad?
- La persona asertiva actúa con empatía. Si necesitas hacer alguna corrección o, por el contrario, estás muy satisfecho con el trabajo de algún compañero, encuentra un momento en el que poder hablar en privado para no poner en un compromiso a tu interlocutor.
- El jefe asertivo acepta sugerencias. Escucha con atención las sugerencias de tu equipo. Intenta no decir NO de entrada: aunque no te guste la propuesta, concédete un tiempo para valorarla y luego argumenta tu decisión. De esta manera, tu equipo percibirá que su opinión se tiene en cuenta y se sentirá libre para proponer ideas en tu presencia.
- Sé autocrítico. No eres infalible y también puedes equivocarte, verdad? 😉 . La persona asertiva no tiene problemas en reconocer sus fallos y procura corregirlos.
- Aprende inteligencia emocional y domina lo que transmite tu cuerpo. ¿Sabes que el tono que utilizas y tu lenguaje corporal tienen un impacto en el equipo? La mejor manera de valorar a tu interlocutor es mirándole a los ojos y escuchándole con atención. ¡Recuerda que escuchar y oir no significan lo mismo!
- Respeta a los demás. No abuses de tu posición de poder ni impongas tus condiciones. Procura ser claro y conciso al explicar tus ideas dando la oportunidad al equipo para proponer sugerencias o resolver dudas.
- Domina tus estados de ánimo. Como decíamos al principio, todos podemos tener días malos pero hemos de aprender a gestionar estas emociones para que no repercutan en el estado de ánimo de nuestros compañeros.